Eduardo Matos Moctezuma recibe el premio Juan Crisóstomo en la FUL 2015

• "Soy simplemente un buscador del tiempo perdido", afirma el arqueólogo, al recibir el Premio a las Humanidades 2015

El rector de la UAEH, Humberto Veras Godoy entregó
el reconocimiento al destacado investigador,
quien recordó que decidió estudiar arqueología
a partir de haber leído un libro.

Como parte la Feria Universitaria del Libro, FUL 2015, que organizan la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) y su Patronato con el auspicio del Conaculta, el arqueólogo mexicano, Eduardo Matos Moctezuma, recibió el premio Juan Crisóstomo Doria a las Humanidades 2015 en reconocimiento a su trayectoria y a su aportación a la cultura mexicana a través de sus múltiples investigaciones sobre culturas prehispánicas.

Tras exponer la vasta obra del investigador, el rector Humberto Veras Godoy y el presidente de la FUL 2015, Marco Antonio Alfaro Morales, celebraron la labor de Matos Moctezuma como promotor permanente de la cultura mexicana ante el mundo.

A su vez, el investigador celebró que este reconocimiento ocurriera en el marco de la Feria Universitaria del Libro, toda vez que estos espacios de promoción literaria se han convertido en intermediarios entre el intelecto y la sabiduría, entre el libro y el lector.

En este contexto, recordó que fue el encuentro con un libro su durante su adolescencia lo que definió su carrera como arqueólogo y lo llevó a convertirse en el profesionista que hoy es. "En aquellas páginas encontré mi razón de ser", afirmó.

Tras recibir la presea, Matos Moctezuma también festejó que tal reconocimiento lleve el nombre de Juan Crisóstomo Doria, hombre de reconocido talento histórico y uno de los personajes de mayor relevancia en Hidalgo, tierra en la que Matos vio los inicios de su carrera.

"Soy simplemente un buscador del tiempo perdido, que en sus inicios recorrió las tierras hidalguenses en busca del pasado", dijo al recordar sus inicios como antropólogo en Tepeapulco y expresó y agradeció a la Universidad Autónoma de Hidalgo y a sus autoridades el promover esta clase de actividades culturales, que además de ofrecer nuevos derroteros a los estudiantes la convierten en un faro formador de conciencias, concluyó.